No es ningún secreto que el yoga es beneficioso para nuestro cuerpo y nuestra mente. Transformar nuestro cuerpo al mismo tiempo que ponemos en paz nuestro interior es todo un reto para equilibrar el vertiginoso ritmo de vida al que estamos sometidos y ha convertido las clases de yoga en una de las actividades más demandadas.
Llegar a practicarlo por tu cuenta requiere años de preparación y práctica continuada pero puedes comenzar por rutinas de yoga en grupo, como las que impartimos en Holiday world, para familiarizarte con las posturas y la respiración, contando con la supervisión de un profesor preparado.
¿Quieres descubrir un plus de salud añadido a los beneficios habituales del yoga?. Anímate a practicarlo en la playa y ejercita el saludo al sol para recargarte de energía al amanecer o a la caída de la tarde.
La mágica luz dorada y el susurro del mar serán tus compañeros de meditación mientras tu cuerpo se beneficia de las ventajas de practicar yoga en la playa. ¿Quieres conocer todas sus ventajas?.
Más vitamina D
Tu cuerpo produce y se beneficia de la vitamina D al estar expuestos a la luz solar. Elige las horas de sol suave para no quemarte y disfruta de la temperatura más que agradable de esos primeros rayos del día o de la caída del sol. Aquí tienes una excusa perfecta para disfrutar de un rato al aire libre en verano.
Mejor oxigenación
Mejorarás tu nivel de energía y tu cuerpo conseguirá una mejor oxigenación al practicar deporte al aire libre. Respirar el aire fresco y limpio que viene del mar ayudará a refrescar tu pulmones y te dará los beneficios añadidos de las sales y minerales que se evaporan del mar.
Aprovecha para respirar profundamente durante la práctica del yoga y limpia tu cuerpo desde el interior.
Más trabajo muscular
La arena es una superficie inestable e irregular que dificultará el equilibrio y te costará más practicar algunas posturas pero de esta manera trabajas más la parte muscular para encontrar la estabilidad.
Los movimientos de la arena obligan a tu cuerpo a hacer pequeño ajustes constantemente haciendo que actives algunos músculos que no solemos usar habitualmente para esas posturas. Practicar el yoga en la arena es más intenso pero es un excelente ejercicio físico en el que quemarás más calorías.
Perderás el miedo
Descubrirás que la playa es el mejor lugar para practicar las posturas invertidas y superar el miedo a caer. Si caes en la arena hay muy poco riesgo de hacerte daño y saldrás más fácilmente de tu zona de confort.
Es el mejor espacio de práctica para el pino o el equilibrio sobre ante brazos… ánimo porque lo acabarás logrando.
Mejorarás el equilibrio
La playa es un lugar perfecto para practicar las posturas de equilibrio de pie, todo un reto que te permite mejorar y profundizar en la práctica del yoga. La superficie cambiante de la arena obliga a contrarrestaría buscando la estabilidad constantemente con la coordinación de los músculos del cuerpo.
Ganarás concentración
Practicar yoga en lugar público en el que puede aparecer gente, ruidos y el constante movimiento del mar supone todo un reto para la concentración. El objetivo es conseguir aislarse mentalmente del entorno fijando la mirada en un punto que no se mueva.
Medita a ritmo del mar
Práctica tus secuencias de yoga con el sonido del mar, usa su ritmo para sentir tu propio “flow” y busca lograr una sintonía entre tu respiración, tu cuerpo y la naturaleza que te rodea. Cambiar tu ritmo habitual de práctica con música por el sonido del mar es un plus de relax para tu mente que agradecerás tras acabar la sesión.
Si quieres beneficiarte de todas estas ventajas, únete a nuestras actividades de yoga y aprovecha para ir temprano por la mañana o al atardecer cuando hay menos gente alrededor. Podrás disfrutar de la paz y la tranquilidad de la playa para hacer tu meditación frente al mar con la luz del sol suave, o para practicar las asanas con mayor concentración y tranquilidad mental.